CAPITULO X
DESTINO
Vamos Sofía llegaremos tarde, sabes que a mis padres no les gusta esperar.-
Dijo Apurada Patricia desde la sala recogiendo todo lo que podrían necesitar
esa noche.-
Claro, claro no podemos hacer esperar a los brujos.- Respondió bajito Sofía.-
Te escuche.- Dijo alto paty abriendo la puerta de la casa.-
Sabiamente Sofía no dijo, ya habían discutido toda la noche anterior sobre
el hecho de no asistir a la cena por la celebración del cumpleaños de su
pareja, todavía ella estaba disgustada por el hecho de ser obligada a ir a un
lugar donde no era bienvenida ni donde ella quería estar, pero el chantaje de
Patricia fue claro “sino vas no tendré relaciones contigo hasta que se me
olvide que me dejaste sola el día de mi cumpleaños, me dejaste sola y
desamparada”, aunque no le gustaba el chantaje de ningún tipo, se rindió a
este, pues no era que no quería ir, era la imposibilidad de los padre de su
novia y ella a estar en un mismo lugar y no terminar discutiendo.-
Es injusto lo que dices, es un chantaje bajo y sin sentido, pero no lo
discutiré te acompañare a la famosa reunión, pero a la primera que ellos me
hagan un desplante me voy.- Dije seria dando por terminado la discusión sobre el
tema.-
Salimos y llegamos al restaurante, en la mesa ya se encontraba sus padres
riéndose, tomando una copa de vino, cuando nos vieron entrar nos sonrieron,
bueno en realidad le sonrieron a Patricia, porque cuando me vieron detrás de
ella, se colocaron serios, sabía que no sería una noche fácil, respire
profundo, tratando de adquirir toda la paciencia necesaria para sobrevivir esa
noche.-
Buenas noches ¿ como están ? - Pregunte educadamente sentándome en la mesa,
Patricia se sentó a mi lado, dándole un suave apretón a mi muslo derecho,
haciéndome entender que tuviera paciencia.-
Hola hija ¿ como estas? ¿ Que quieres para celebrar tu cumpleaños ? hemos
pedido un vino chileno de 1965 esta divino, le sirvieron en su copa
ignorándome por completo, tome una respiración profunda.-
No voy a beber Patricia.- Respondí seria.- Ella se me quedo viendo
sorprendida, pero no comento nada.- Me quede sentada sin participar en lo
que decían, en verdad sentía que estaba sobrando, lo mejor que pude haber hecho
era haberme quedado en la casa, pero de débil me vine con ella.-
Estaban hablando de un novio que tuvo Patricia cuando estaba en la
preparatoria, diciendo que era muy lindo, que estaba soltero, que estaba en el
país haciendo unos proyectos de construcción y todas esas cosas alabando al chico
para que a Patricia se le pasara la gripe que yo le había pegado, estoy
haciendo todo lo posible por controlarme y no decirle lo que los señores
merecían por respeto a Patricia, cuando veo que un joven realmente guapo se
acerca a la mesa con una caja de regalo en la mano, no me hizo falta pensar
mucho para entender que era el chico ex novio de Patricia, cuando gire a verla
pidiéndole una explicación, la veo que esta perdida en él, una sonrisa tonta se
formo en su cara, no espere que el joven llegara para que me presentarán, me
pare y me fui, Patricia no intento detenerme, por un momento pensé que lo
haría, que inmediatamente trataría de hacerlo.- Cuando estoy saliendo del
estacionamiento del restaurante, la veo que sale del local como buscándome,
se que me vio que la vi, pero no frene solo acelere cuando pase por un lado de
donde ella estaba.- No guise ir a la casa, se que ella me buscaría ahí si
es que decide hacerlo porque lo dudo, ella nunca le hace un desplante a
sus padres, conduje a esa hora siete de la noche hasta la oficina, obviamente
todo estaba cerrado; Felipe el joven vigilante se sorprendió de que yo me
encontrara ahí.-
Hola Felipe, vine a revisar unas cosas.- le indique sin darle mucha
importancia, Helen y yo muchas veces nos quedábamos hasta tarde veníamos días
de descanso a adelantar trabajo.-
No se preocupe señora Sofía, estaré pendiente, ya indique que usted se
encuentra en las instalaciones.- Respondió el en tono amable.-
No me di cuenta de lo rápido que paso el tiempo, en menos de lo que pensé
ya era de día, me dolía la espalda porque sin darme cuenta me había quedado
dormida reclinada sobre el escritorio, me pare, fui al pequeño baño que
disponía en mi oficina, me asee un poco y me fui, debía ir a la casa a
cambiarme para ir a la clínica.-
Cuando llegue a la casa, me encuentro a Patricia durmiendo en el sofá de la
sala, me acerco y le pongo una manta mediana que tenemos para podernos abrigar
cuando se está en el sofá, ella se despertó al sentir que le colocaba la ruana,
no me dio oportunidad de reaccionar, y se abrazo a mí, pasando sus brazos
alrededor de mi cuello, escondiendo su cara en mi pecho, estuvimos abrazadas
unos minutos cuando siento que empieza a llorar, no dije nada, y guiándola nos
sentamos en el sofá.-
Lo siento.- dijo sin soltarme.-
Yo lo siento aun mas.- Respondí parándome, continué mi camino hasta la
habitación donde rápidamente me bañe y me arregle, cuando salí ella seguía
llorando en el sofá, no entendía muy bien porque lloraba tanto, me erguí y con
los hombros derechos le pregunte lo más difícil que podía haberle preguntado, a
solo meses de nuestra boda ¿ Te acostaste con él ?.-
Ella no respondió, solo lloro más fuerte, no se si quiero saber la
respuesta, no se que haria si insistía en conocer lo que había detrás de sus
lágrimas, con cuidado puse el anillo en la mesa de descanso que estaba entre
nosotras.-
Me parecía que estaba repitiendo la noche anterior, sabia que era una mala
idea lo de ir a la reunión con sus padres, a lo mejor ya eso había pasado en
otras ocasiones, pero yo no me había enterado por lo cual no me afectaba,
era de las que pensaba y creía en el “ojos que no ven corazón que no siente”
pero me había dolido ver como reacciono ayer con el muchacho.-
Hola Vivian ¿ como estas, como sigue Helen ? .- Pregunte cuando llegue a la
habitación de Helen.-
Hola Sofi, ella está bien, esta despierta ahorita están haciéndole otros exámenes.-
Respondió Vivian visiblemente cansada.-
Estas bien viv?.- Pregunto preocupada por su palidez.-
Si, tranquila no le digas nada a Helen, no quiero preocuparla es el
estres.- respondió tratando de quitarle importancia al malestar que tenia.-
Segura.- Sofía se vio interrumpida por Helen quien llego escoltada por dos
enfermeros, quienes la ayudaron a volver a la cama.-
Como estas Sofí? Pregunto la paciente cuando se acomodo en la cama, estiro
la mano para tomar la de su esposa que estaba ayudándola con las sabanas.-
Bien, y tú? que has decidido ? Helen me comento del nuevo procedimiento
experimental que te harás?.- Comento su amiga.-
Si según el doctor tengo posibilidades de recuperar la visón, claro no es
cien por ciento seguro, pero no pierdo nada con intentarlo, no seria extremadamente
invasivo para mi mis ojos como una operación de la vista, que en mi caso es
imposible por el tipo de daño que han recibido por la enfermedad, así que hemos
pautado el inicio del tratamiento para dentro de cuatro días, aproximadamente
el lunes, claro todo depende de los exámenes realizado.- cuando termino de
hablar Helen se dio cuenta que el anillo que estaba en el dedo anular de Sofía
ya no estaba, detenidamente observo el rostro de su amiga, observando las
profundas ojeras que se mostraban en sus ojos.-
¿ Que paso pregunto ?.- Pregunto Helen sujetando la mano de Sofía.-
No sé, creo que hemos suspendido la boda, ayer cuando celebraba su
cumpleaños con sus padres llego un joven con el cual ella se reía, hasta me
pare de la mesa y ni se dio cuenta, lo admito en un principio fue un ataque de
celos, pero es que escucharlos hablar de cómo era Paty antes de conocerme, no
pude hacer mas nada, no me controle, yo ya le había dicho que no quería ir, que
en verdad no nos pusiera en esa posición, pero ella insistió. Cuando llegue
esta mañana a la casa, ella me abrazo pero me abrazo con culpa, como con miedo
de que me fuera, por lo que me hizo sospechar que tal vez se acostó con
el, es que si tu vieras visto como le sonría cuando llego a la mesa, como se veían.
Sofía no pudo controlarlo más y lloro ahí frente a sus amigas.-
Sofía pero te has ido, la has dejado, te has quitado hasta el anillo de compromiso,
a lo mejor era lo que ella temía, que por lo que ha sucedido ayer te fuera, sin
que eso signifique que ella haya estado sexualmente con alguien más, ella te
ama, yo dudo que en verdad ella puede hacerte algo así. Las relaciones no son fáciles,
son dos, y muchas veces ella hará cosas que no te gusten o tu cosas que no le
gusten a ella, pero no puedes huir las veces que eso suceda, no es justo para
ninguna de las dos.- aconsejo Helen dulcemente, sentía mucho cariño por su
amiga, había sido testigo como la relación a lo largo de este año o mejor dicho
casi dos años había crecido.
No sé si soy un capricho o en verdad me ama, podría cansarse de estar con
una mujer, al final yo soy la única mujer de su vida, a lo mejor está
experimentando y lo suyo son los hombres, ha siempre tenido debilidad por
ellos, su mama y hasta ella misma lo ha dicho disfrutaba de los hombres, le
gustaban, no sé qué de ellos, pero a ella le fascinaban, porque debo yo
pretender ser ciega a lo que ella ha sido durante 25 años de su vida. Además es
joven y si no quiere casarse, si no quiere estar casada conmigo, eso puede ser
y no consigue como decirme que solo fui una confusión en su orientación
sexual.- Contesto preocupada, dolida Sofía.-
No creo que sea eso, pero yo no puedo darte esas respuestas, debes hablar
con ella, he visto en su mirada el amor que te tiene, no dejes que las dudas y
los errores tontos acaben con el amor y la relación que ustedes han
construido.- respondió Helen preocupada por lo que estaba sucediendo.-
A su lado estaba sentada vivían, quien estaba tratando de sentirse mejor,
ya que el mareo era cada vez peor, no había descansado en los últimos días, por
obvias razones, pero hoy era como si el hecho de estar erguida significara una
labor titánica, le costaba enfocar y su capacidad de reacción era aun más lenta
que lo de costumbre, Sofía ya le había dicho que estaba pálida, por lo cual, se
había querido mantener un poco alejada de Helen para que esta no se diera
cuenta y se preocupara.-
El grupo cambio el tema, para no seguir preocupándose, Sofía estaba triste
a solo pocos meses de su boda, ahora estaba técnicamente soltera, aunque no sabía
a ciencia cierta en qué punto se encontraba la relación, había salido de su
casa sin tenerlo claro, y ya estaba en las últimas horas de la tarde y aun no tenía
claro que había sucedido, Patricia no había intentado comunicarse con ella, ni
ella con Patricia así que estaba como en la guerra fría. Cuando llego a su casa
a las 8 de la noche, se sorprendió de ver una pequeña reunión en su casa, en
ella se encontraban los padres de Patricia y el joven causante de todo el mal
entendido, aunque era injusto decir que él era el culpable solamente.-
Buenas noches .- Saludo cuando llego a la sala.- continuo su camino hasta
llegar a su habitación lo que quería era bañarse y acostarse, de ser posible
retroceder el tiempo, para regresar a la noche anterior del cumpleaños de su prometida
y negarse rotundamente a ir a esa cena.-
Cuando entro se sorprendió de ver a Patricia en el cuarto, esperaba que
estuviera atendiendo a los invitados, “hola” saludo deteniéndose en la puerta,
no sabía que decir, como actuar, ¿Que éramos? ¿Qué significaba su familia
en la casa?.-
¿ Por que están tus padres aquí ?.- Pregunte con un hilo de voz que logre
reunir del fondo de mi ser.-
Yo, yo necesito un tiempo para pensar.- Respondió ella sin moverse de donde
estaba.-
La observe durante unos segundos sin saber que decir, como interpretarse lo
que ella estaba diciendo, ¿ como
habíamos llegado a esto ? ¿ Que nos sucedió ? .- Haz lo que quieras Patricia,
tomate todo el tiempo que tú quieras, necesites o como quieras decirle, solo
que yo no te esperare. - respondí con un nudo en la garganta, con la cabeza con
un gran signo de exclamación y en mi pecho un dolor, que si no es porque sé
que es imposible habría jurado que mi corazón había dejado de latir.-
Entre al baño, necesitaba dejar de verla, pero no me iría de mi casa,
mientras ella comete el peor error de su vida, cerré con llave la puerta, me metí
en la bañera con agua caliente, y ahí llore todo lo que pude, no sé si me toco
la puerta, no recuerdo mucho, solo sé que salí de la bañera cuando empecé a
sentir frio y mis dientes comenzaron a castañear. Cuando salí ya ella no
estaba, revise de masoquista el closet, para darme cuenta que se había llevado
gran parte de sus cosas, poco a poco fui revisando todo, para notar que prácticamente
no había dejado nada que delatara que alguna vez estuvo en mi casa, en la mesa
de la cocina vi que había dejado una nota, por un segundo pensé en botarla sin
leerla pero luego me dije que al menos me merecía una explicación asi sea a
medias.-
Querida Sofí.-
Siento tanto que tenga que leer esta nota, no quise nunca que esto fuera así,
trate de explicarte pero no saliste del baño.-
Quiero decirte que te amo, que aunque no lo creas es así, te amo pero también
amo a mis padres, tal vez ellos tienen razón y debo conocerme, saber qué es lo que quiero y
que no quiero, si me caso contigo quiero que sea para toda la vida, no quiero
divorciarme, solo quiero estar segura de que en verdad estar a tu lado es lo correcto,
para eso necesito demostrarte que aun en la distancia te amo.-
Siempre tuya Patricia.
Termine de leer la nota y no podía creerlo, todo había sido culpa de sus
dudas, pues así las resuelva dentro de dos minutos a mi lado no la quiero, no
quiero volver a verla. Me dije, con lo poco que me quedaba de orgullo, busque
una caja y comencé a guardar todas las cosas de ella que conseguí, la carta la
guarde en la gaveta del ceibo de mi oficina, era donde más tiempo pasaba, así tendría un recordatorio para todos los días en los que quiera perdonarla
recordar todo el dolor que estoy sintiendo por ella en este momento.-
Han pasado casi dos meses desde que ella se fue de la casa, no he querido
preguntar nada a nadie pero inevitablemente he escuchado rumores de que está de
viaje en Francia, cuando lo escuche no mentiré me dolió, pero como pude amarre
mi corazón y le cree otra capa, si regresa por mí no encontrara aquí nada de mí
por ella, y si no lo hace, simplemente me asegurare de que no vuelvan a jugar
conmigo.-
Sofía te estoy hablando.- grito Helen, observándome detenidamente.-
Discúlpame estaba pensando en otras cosas.- Dije avergonzada.-
Se en quien estabas pensando, deberías buscarla, no pueden terminar así no
es justo.- comento Helen parándose para abrazar a su amiga.-
No, no la buscare, ella decidió, espero que sea feliz con quien quiera que
este o con lo que esté haciendo, dejare de amarla.- Lo prometo.- sentencie.-
Helen sabiamente no respondió, solo se limito abrazar a su amiga.-
* * *
Viv, donde estas?.- Pregunto Helen cuando entro a la casa y no vio a
Vivian, generalmente ella siempre salía a su encuentro cuando llegaba a la
casa.- Subió directo a la habitación donde no la encontró, continuo buscándola
en cada ambiente de la casa hasta que la encontró en la oficina, se encontraba
leyendo unos papeles, con música de fondo, no muy alta un volumen agradable,
Hola viv, te estaba buscando ¿ Que
lees ?.- Pregunte acercándome a saludarla.
Oh, me asustaste corazón, estoy leyendo unos informes, quiero darte una
sorpresa, pero debo analizar esto bien.- Respondió ella guardando los papeles y
parándose para saludar a su esposa.-
¿ Quieres ir a comer a fuera ? hoy
tengo pocas ganas de cocinar, ya sabes cómo queda mi comida si no tengo ganas
de cocinar.- Pregunto Vivian en tono bromista.-
Claro, vamos a comer afuera, ¿ invitamos a Sofía ?.- Pregunte robándole un
beso suave de sus labios, pegando mi cuerpo mas ella, inmediatamente sentí como
su piel se erizo, continué el beso haciéndola retroceder unos pasos hasta que
sus caderas se encontraron con el escritorio de vidrio moderno que habíamos
comprado recientemente para su oficina, me coloque entre sus piernas, metiendo
mis manos entre su camisa y su piel, ella me rodeo la cadera con sus piernas,
me atrajo hacia ella quedando ambas recostadas sobre el escritorio, comencé a
quitarle su blusa de algodón, sorprendiéndome que no llevara sujetador, tenia
los senos firmes, definidos, se veían erguidos sin necesidad de un sujetador,
comprendí los beneficios de pagar un entrenador que nos ayudara con los
ejercicio en casa, los bese delicadamente, chupándolos y delineando su forma
redondeada con mi lengua, sus gemidos me incitaban a perderme en su piel, en
toda ella, en hundirme en ella, hasta hacernos una, recurrí su abdomen, bajando
por sus piernas, subiendo entre ellas, llenado ese centro caliente de besos,
perdiéndome en su sabor dulce, hasta que sentí como los temblores del
máximo placer se adueñaron de ella y a la vez también de mi, sentí como las dos nos convertíamos en una en
ese preciso momento. No sé cuánto tiempo estuvimos abrazadas en el piso de la
oficina, disfrutando de nuestros cuerpos desnudos, de esa maravillosa sensación
que queda luego de hacer el amor con la persona que amas, ambas estábamos
sumidas en nuestros pensamientos.-
Que opinarías si en un caso hipotético, dentro de unos meses pudieras
sentir pequeñas pataditas aquí.- Dijo ella, colocando mi mano sobre su
vientre.-
¿ En serio ?, a mi me parecía estupendo, claro primero sabiendo que no
afectara tu salud para nada.- Dije emocionada sintiendo un calorcito en mi
pecho de la emoción de saber que probablemente esta sea la primera charla para
poder tener un bebé en el futuro.-
No significaría mucho problema para mi salud, solo debo tener cuidado con
mi alimentación y descanso, tratar de no extenuarme, he hablado con los
doctores y están bastante seguros que no pone en riesgo mi salud.- Respondió
ella colocándose sobre mí.- Nos volvimos a perder en el cuerpo de la otra,
volví a sentir como ella llegaba al orgasmo por culpa de mi boca, y yo llegue por culpa de la suya, el
sesenta y nueve mas delicioso que habíamos hecho, creo que también tenía que
ver con la noticia de que estábamos más cerca de cumplir nuestro sueño de ser
mamá.-
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